Historia

La mantequería de Zhitómir está creada en 1981. Hasta el 1976 en su territorio se encontraba el frigorífico de Zhitómir. Del 1976 al 1981 se realizó la reconstrucción compleja de los locales.

Comenzando desde el 1981 han sido introducidos por etapas los talleres de producción de aceite de sebo,
de leche seca, desnatada, de helado.

Del 1 de abril de 1998 la “Mantequería de Zhitómir”, S. A. P. comenzó a hacer la producción con marca comercial “Rud”, tal decisión fue tomada en las reuniones generales del colectivo laboral, honrando a su líder, sus conocimientos y las habilidades de organizador. Primero, han estudiado más de 60 variantes de los nombres de la marca comercial, pero de todos los modos han dado a la marca el nombre de director. Las ambiciones personales no tienen nada que ver con esto, simplemente uno querrería que en el nombre de marca los consumidores vean una persona concreta que asume sobre sí la responsabilidad por los actos de la empresa y las promesas que están relacionadas con la producción.

En la historia cómo la mantequería de Zhitómir ha salido fuera de los límites de su región un papel importante lo jugó un incidente. En los mediados de los años 90 el competidor del mercado ucraniano de helado era la producción de Polonia. Exactamente con esta producción se llenó todo el mercado nacional. Pero las innovaciones de los aranceles de entrada pararon prácticamnente en un instante las entregas de esta producción, así para los productores ucranianos se abrió una parte del mercado grande que no estaba llena por nadie. En aquel entonces no había muchos productores nacionales grandes de helado (durante 2—3 años en Ucrania incluso se había observado el déficit de este tesoro frío), además las potencias de mayor parte de la empresa no permitían contar con status de los productores nacionales. Pero en aquel entonces la mantequería de Zhitómir ya se sentía apretada en su región. El vacío creado en el mercado ha abierto para la empresa nuevos territorios de venta, son todas las regiones de Ucrania, y al mismo tiempo los países europeos, Israel, Japón y los EEUU.

El secreto de este éxito es simple, es la calidad alta, el carácter original y la renovación constante del surtido, que correspondería a las tendencias modernas del mercado, uniendo en sí las tecnologías innovadoras y las tradiciones.